L’Hospitalet de l’Infant, 2 de noviembre de 2013. La central nuclear Vandellós II se ha desconectado de la red eléctrica a las 00 h. de hoy para iniciar la 19ª recarga de combustible y los trabajos de mantenimiento previstos, que darán paso a un nuevo ciclo de operación de 18 meses. En esta parada está previsto acometer más de 7.300 órdenes de trabajo, la mayoría de las cuales corresponden a trabajos de mantenimiento preventivo e inspecciones, y cuyo presupuesto asciende aproximadamente a 21 millones de euros.
La realización de un volumen tan significativo de tareas requiere una planificación previa muy detallada y la coordinación de todas las unidades organizativas implicadas, que trabajan formando grupos multidisciplinares para coordinar todos los trabajos que se llevarán a cabo, desde su fase de preparación hasta la de ejecución. Esta planificación de tareas, sumada a los esfuerzos en el área de prevención de riesgos laborales, a la contratación de personal adicional y a la formación, permitirá alcanzar los hitos planificados con la máxima seguridad y en el tiempo previsto.
En la 19ª recarga de combustible, CN Vandellós II duplicará la plantilla que habitualmente trabaja en la central. De esta manera, alrededor de 1.000 profesionales de unas 40 empresas colaboradoras, la mayoría de ellos residentes en la provincia de Tarragona, se incorporarán a las más de 1.000 personas que trabajan en la central. Este equipo humano, además de la formación que ha cursado antes de su incorporación a la central, recibirá en ANAV una preparación específica que se determina de acuerdo al puesto de trabajo que ocupará en la planta.
En este sentido, una de las novedades de esta parada es la creación de un espacio dentro del “Aula ANAV” de formación, situada en el Vivero de Empresas de Vandellòs i l’Hospitalet de l’Infant donde su ubica la Oficina de Recarga, en la que los profesionales podrán ensayar en un simulador muchos de los trabajos que se desarrollarán durante este período.
Entre las actuaciones más relevantes que se llevarán a cabo en la 19ª recarga de CN Vandellós II destacan, además de la sustitución de 64 de los 157 elementos combustibles alojados en el reactor, las modificaciones de diseño relacionadas con el proyecto Refuerzo de la Seguridad derivado de las pruebas de resistencia, contempladas en las Instrucciones Técnicas Complementarias emitidas por el Consejo de Seguridad Nuclear. Se trata de modificaciones que permitirán facilitar el uso de los nuevos equipos portátiles adquiridos, como las bombas de alta y baja presión, los equipos de iluminación y los grupos electrógenos, e incrementar así la robustez y la capacidad de respuesta de la planta ante sucesos que pudiesen ir más allá de las bases de diseño de la central. Algunos de estos trabajos consisten en la instalación de sistemas que permitan la inyección alternativa de agua a los tres generadores de vapor con la bomba portátil, al sistema primario y al sistema de rociado de la contención.
Otras actuaciones contempladas para esta recarga son la inspección de las barras de control y de los tubos guía, la modificación de diseño de la grúa manipuladora de combustible de la contención, las inspecciones periódicas de los generadores de vapor y la sustitución de los monitores del sistema de vigilancia de la radiación, por citar algunos.
La 19ª recarga de combustible de la central nuclear Vandellós II pondrá punto y final a un ciclo en el que la central ha alcanzado los 25 años de operación comercial y permitirá afrontar un nuevo ciclo con la máxima seguridad y fiabilidad, valores que, según el director de Vandellós II, Rafael Martín “también deberán estar muy presentes en todas y cada una de las actividades de la recarga”. “La manera más segura de trabajar y la que garantiza mejores resultados es hacerlo según lo planificado y con calidad”, asegura Martín.